DCP son mis iniciales. Soy gallego, nacido en O Rosal (Pontevedra), una hermosa villa
famosa por sus vinos.
Tras acabar la EGB comencé mis estudios de BUP en la optativa de letras mixtas,
dado a que los números nunca se me dieron muy bien (por lo menos en aquellas edades),
pero nunca acabé ese Bachillerato y contra todo pronóstico me matriculé en la formación profesional
de Gestión Administrativa, la cual finalicé obteniendo el correspondiente título de Técnico en Gestión
Administrativa.
Mi vida laboral se decantó por el sector logístico y complementé mis estudios con el título de
Técnico en Gestión de Almacenes y Parques.
Tras un día a día incompleto, donde llegar a fin de mes se hacía muy apretado fui buscando
alternativas de conseguir ingresos extras en mi Haber, probando varias opciones que no me
completaban ni generaban los ingresos extras que esperaba.
En una búsqueda por Internet encontré la palabra "trading". Para mí era nueva, desconocida, e
indagué más sobre ella. Busqué guías por la red sobre cómo hacer ese "trading", libros que
explicasen como obtener ese éxito que vendían tan fácil.
En su momento me registré en una plataforma que sólo por ello me regalaban un bono de bienvenida
de 25 euros para probar. Dentro de mi ignorancia empecé a operar, y aunque suene a chiste,
ese insignificante bono, con un apalancamiento (en aquel momento tampoco conocía esa palabra)
de 1:500 conseguí obtener beneficios poco a poco.
Hace ya 7 años de esos comienzos.
Asistí a conferencias en salas de hoteles donde no me explicaron nada nuevo de lo que hubiese
leído, buscando la forma de vender su bróker, pero asistí a más conferencias donde se repetía lo
mismo: explicar conocimientos muy básicos del trading y los CFD para acabar vendiendo su bróker.
Nunca compré ninguno.
Tras mis propios análisis y escasos conocimientos, opté por un bróker del cual nunca me hablaron
en ninguna conferencia a las que fui, pero con el cual estoy contento y son muy rápidos en cuanto a
la hora de hacer una retirada a cuenta, así que no vendo nada. Creo que cada cual es libre de su
elección.
A día de hoy el trading me da alegrías y dolores de cabeza.
Sigo siendo empleado por cuenta ajena en el sector logístico.
El mundo del trading no me ha quitado
del trabajo, pero me ha demostrado que SI se puede vivir de él.
Espero algún día poder decir adiós a las ataduras laborales para dedicarme 100% a este mundo que
no conoce límites (ni de ganancias ni de pérdidas económicas), pero mientras tanto, espero desde
este espacio compartir mis experiencias dentro de mis escasos conocimientos.
Si estás en esta página, es porqué estás buscando el cambio que yo busqué en su día y te animo a
no desistir, pero ante todo, a formarte, pues para vivir del azar ya tenemos los casinos.